Cuidados postoperatorios de la hernia inguinal (primeros 15 días)
Después de someterse a una cirugía de hernia inguinal, es importante seguir ciertos cuidados en el período posterior a la operación, de ese modo facilitar la recuperación y prevenir complicaciones. Aquí hay algunas pautas generales que se suelen seguir para los cuidados postoperatorios de la hernia Inguinal:
¿Que es la cicatrización?

La cicatrización normal es un proceso que ocurre después de una operación de Hernia inguinal. Al inicio ocurre una inflamación local dada por una contracción de los vasos sanguíneos para controlar la pérdida de sangre, la presencia de líquido y un ligero edema. No obstante, al pasar unas horas los vasos sanguíneos de dilatan para llevar células de reparación al sitio de la herida. Se activan todos los procesos de coagulación para detener al sangrado . En la siguiente fase de recuperación postoperatoria de la hernia inguinal, las células llamadas fibroblastos producen colágeno, que fortalece la herida. Finalmente, en la etapa de remodelación, el colágeno se reorganiza y se forma una cicatriz más fuerte y resistente. Este proceso generalmente lleva de semanas a meses y puede variar según la gravedad de la lesión y la salud del individuo.
Tips sobre los cuidados postoperatorios de la hernia inguinal
Para un cuidado postoperatorio de hernia inguinal es fundamental descansar lo suficiente después de la cirugía. Evite realizar actividades físicas al menos las primeras semanas. Siga las instrucciones de su médico sobre cuándo puede reanudar gradualmente las actividades normales.
Recuerde que las operaciones de las hernias inguinales requieren de reparo en su pared abdominal, por lo que se debe ser prudente.
Muchos pacientes con operación de hernia inguinal se sienten muy bien en su postoperatorio y no esperan el tiempo necesario para que se complete el periodo de cicatrización. Por lo que pueden sufrir retraso en el proceso de recuperación o llegar a presentar complicaciones postoperatorias de la hernia inguinal.
Es posible que se le receten analgésicos para controlar el dolor después de la cirugía. Tome los medicamentos según las indicaciones del médico y no se automedique. Si el dolor persiste o empeora, consulte a su médico.
En importante para un adecuado cuidado postoperatorio de la hernia inguinal, sobre todo en los primeros días tomar los medicamentos para el dolor aunque no lo tenga, de esta manera evita que se desencadenen los mecanismos del dolor.
Evitar el estreñimiento: Luego de la operación de la hernia inguinal debe mantener una dieta equilibrada y rica en fibra para evitar el estreñimiento, ya que la tensión durante las evacuaciones puede ejercer presión sobre la zona de la hernia. Beba suficiente agua y consuma alimentos como frutas, verduras y granos integrales.
Cuidados de la Herida Quirúrgica de la hernia inguinal
Mantenga el área de la incisión limpia y seca. Siga las instrucciones del médico en cuanto a la limpieza y el cambio de apósitos. No manipule ni rasque la herida para prevenir infecciones.
-Usualmente indicamos que se puede lavar las heridas con agua y jabón de baño.
– Luego sugerimos secar el área con aire fresco o con paños limpios.
– Ya en cama se puede aplicar soluciones antisépticas tópicas como el yodo povidona el cual se debe evitar si el paciente sufre reacción adversa a esta sustancia.
– Luego se debe secar preferiblemente con aire, cabe resaltar que la herida se beneficia de estar expuesta, sin nada que la comprima y en un medio fresco. No obstante en muchas ocasiones esto no es posible por lo que aconsejamos que sea cubierta con una gasa estéril.
Beneficios del frio en la herida quirúrgica de la Hernia Inguinal
El uso de frío local en una herida puede tener varios efectos positivos en el proceso de curación. Al aplicar frío en la zona afectada, se producen los siguientes beneficios:
1. Reducción del dolor: El frío local tiene propiedades analgésicas y puede ayudar a disminuir la sensación de dolor en la herida. Por otro lado actúa como un anestésico natural al entorpecer la conducción de las señales de dolor hacia el cerebro.
2. Control de la inflamación: El frío en la herida ocasiona contracción de los vasos sanguíneos, por lo tanto, previene la hemorragia, favorece la reducción de la inflamación al disminuir el flujo sanguíneo y previene la acumulación de líquido en la herida.
Es importante tener en cuenta que la aplicación de frío debe hacerse de manera adecuada y siguiendo las recomendaciones médicas. El uso de bolsas de hielo envueltas en un paño o compresas frías puede ser una opción segura y efectiva para el frío local en la herida. Sin embargo, es fundamental consultar con un profesional de la salud para obtener orientación específica según el tipo y la gravedad de la herida.
Beneficios de la Faja Abdominal Postoperatoria
El uso de una faja abdominal o soporte para el postoperatorio de la hernia inguinal puede ofrecer varios beneficios. Estos incluyen:
La faja abdominal proporciona un soporte adicional a la zona afectada, lo que puede ayudar a reducir la tensión en los músculos y tejidos cercanos a la hernia. Esto puede brindar una sensación de estabilidad y comodidad durante el proceso de curación.
Al brindar soporte y sujeción a la zona operada, la faja puede ayudar a reducir la incomodidad y el dolor asociados con los movimientos y la presión en la región inguinal.
El uso de una faja postoperatoria puede ayudar a prevenir la reaparición o recidiva de la hernia inguinal. Al mantener una presión suave y constante sobre el área, se puede evitar la tensión excesiva en la pared abdominal, lo que contribuye a la prevención de una nueva hernia.
Uso de antibióticos luego de la operación de Hernia Inguinal

Utilizar medicamentos antibióticos en los cuidados postoperatorios de la hernia inguinal es una alternativa de tratamiento que no siempre se utiliza. Su especialista en Cirugía es el que decide si debe utilizar o no este grupo de fármacos. La decisión de utilizarlos o no depende del riesgo a adquirir una infección en el sitio de la operación. No obstante, debe recordar que el uso de estos medicamentos cuando no son necesarios, puede ocasionar daños en la flora bacteriana del colon, así como favorecer a la resistencia de los gérmenes que habitan en nuestro organismo.
¿Cómo debe estar la herida en los primeros días de la operación de Hernia Inguinal?
En los primeros días después de la operación de hernia inguinal, es común que la herida presente las siguientes características:
- Incisión quirúrgica: La herida será una incisión quirúrgica cerrada con suturas o grapas. La longitud y ubicación de la incisión pueden variar según el tipo de técnica utilizada en la cirugía.
- Inflamación: Es normal que la zona alrededor de la herida esté inflamada en los primeros días después de la operación. La inflamación es una respuesta natural del cuerpo al trauma quirúrgico y debería disminuir gradualmente con el tiempo.
- Enrojecimiento y sensibilidad: La herida puede mostrar enrojecimiento y sensibilidad en los primeros días. Esto también es una respuesta normal debido a la inflamación y el proceso de cicatrización.
- Dolor: Es probable que experimentes cierto nivel de dolor en la zona de la herida. Sin embargo, el grado de dolor puede variar de una persona a otra. Tu médico puede recetarte medicamentos para el dolor que te ayuden a controlar la incomodidad.
- Drenaje: Puede haber un ligero drenaje de líquido claro o rosado en los primeros días posteriores a la operación. Esto es normal, ya que el cuerpo puede producir un líquido llamado suero para ayudar en el proceso de curación.
¿Podrás tener relaciones sexuales los primeros 15 días de la operación de Hernia Inguinal?

¿Podré tener relaciones sexuales en estos días?
La respuesta es !No!
El dolor persistente en la ingle tras la cirugía de hernia se manifiesta con dolor o sensaciones diferentes en la zona operada como puede ser calabres o pérdida de la sencibilidad, además puede extenderse hacia genitales y muslo.
El dolor postperatorio persistente en la ingle después de una cirugía de hernia es preocupante, afectando alrededor del 10% de los pacientes. Puede ser causado por inflamación del hueso púbico (dolor somático) o daño en nervios (dolor neuropático). Es esencial distinguir entre estos dos tipos de dolor, ya que se tratan de manera diferente. El diagnóstico y tratamiento deben ser establecidos por el médico, generalmente incluyendo cirugía.